Cuando viajamos en moto, no siempre tenemos la suerte de poder ir hasta nuestro destino disfrutando el camino por un puerto de montaña. Hay algunas zonas en las que, para coger cuatro curvas, tienes que ir recto durante un rato. Y para mí, cuando voy en verano a Asturias, es un poco así. Soy un poco ansia de la vida y prefiero tirarme 5 horas de autovía para disfrutar de un par de horas de curvas que tardar 7 horas en llegar a la zona chula pasando por «curvas» que no merecen la pena. Por eso, y como ya soy experta en coger la moto e irme yo sola donde haga falta (y en plena ola de calor), os voy a dejar algunos consejos para un viaje largo y caluroso por autovía.
450km en moto por Autovía

El plan era el siguiente: salir de Madrid a las 7 y media de la mañana, con la fresca, recorrer 450km de autovía por la A6 hasta Ponte de Neira para después coger dos horas de curvas hasta llegar a Boal, mi destino de vacaciones. En mitad de esas curvas, en A Fonsagrada, me esperaría mi chico, para acompañarme durante el final del trayecto. Y tras esto, una semana disfrutando de las sorpresas que te dan las carreteras asturianas. No estaba mal, ¿verdad? Pero cuando haces en moto esos 450km de autovía tú sola, tienes que sacar a relucir tu ingenio para que el camino no se haga tan pesado.
El plan era el siguiente: salir de Madrid a las 7 y media de la mañana, con la fresca, recorrer 450km de autovía por la A6 hasta Ponte de Neira para después coger dos horas de curvas hasta llegar a Boal, mi destino de vacaciones. En mitad de esas curvas, en A Fonsagrada, me esperaría mi chico, para acompañarme durante el final del trayecto. Y tras esto, una semana disfrutando de las sorpresas que te dan las carreteras asturianas. No estaba mal, ¿verdad? Pero cuando haces en moto esos 450km de autovía tú sola, tienes que sacar a relucir tu ingenio para que el camino no se haga tan pesado.

Consejos para un viaje largo en moto
En primer lugar, hay que coger la moto con la actitud correcta. No puedes ir pensando que te quedan 5 horas porque si no, van a ser las más largas de tu vida. Tú piensa que vas a tomar café a la ciudad de al lado y luego a comer a la de más allá. Pero, de todas formas, para que se haga menos pesado, aquí van estos consejos para no perder la cabeza ni quedarte con los huesos atrofiados.
Consejos para no perder la cabeza
Microdestinos
Es muy importante que en vez de pensar en el viaje como 450km de autovía, lo plantees como si fuera un videojuego. Para ello, no hay nada como crear microdestinos (palabra que no sé si he inventado pero casi). Por ejemplo. Cuando yo salí de la AP6, vi un cartel en el que ponía «Medina del Campo 36» y pensé: «Bah, eso en quince minutos está hecho». Y efectivamente, llegué a Medina del Campo y el siguiente cartel era «Tordesillas 25» (las cifras no las recuerdo con exactitud pero para que te hagas una idea). Pues eso, otros 15 minutos.
Una vez llegué a Tordesillas, quedaban poco más de 30km para llegar a la Estación de Servicio donde me gusta parar a tomar café. Pues en el momento en el que me pedí ese café con leche y con hielo llevaba ya dos horas de autovía y casi no me había dado cuenta porque mi cabeza, cada vez que llegaba a un microdestino, se mantenía feliz sintiendo que avanzaba. Es como si fueses pasando pantallas de un videojuego en el que el monstruo final está al final del camino. A nivel mental es genial.

Mide las distancias, pero siempre por lo bajo
A la hora de mirar ese temido cartel donde ves eso de «Madrid 300km», tira siempre por lo bajo. En vez de medir esa distancia como 300km=3 horas, piensa que a 150km/h son solo dos, que tardarás poco más de dos horas. Que eso no significa que vayas a 150km/h pero así mentalmente, te quitarás una hora de camino.

Consejos para no agotarse físicamente
Cambia de postura durante el trayecto
Cuando llevas una hora en la misma postura conduciendo en línea recta el cuerpo se comienza a cansar. Para evitar esto, es recomendable cambiar la posición del cuerpo, adelantarse o retrasarse en el asiento hace que la postura de la espalda también varíe y que no se te agarrote el cuerpo.
Aprovecha los momentos de menor velocidad para estirar
Cuando entras en un túnel, cuando pasas un radar de tramo, aprovecha para estirarte encima de la moto. Estira las piernas, mueve el cuello, estira la espalda… Todo siempre de manera responsable y a baja velocidad. Esto favorecerá también que no te tengan que despegar del asiento cuando te quieras bajar de la moto.

Consejos para sobrevivir a una ola de calor en moto
Bebe mucha agua
Parece una tontería pero, cuando te toca coger la moto en mitad de una ola de calor, bebe muchísima agua y lleva una botella entre tus cosas. Si está caliente cuando hagas una parada, siempre podrás echártela encima para refrescarte.
Aprovecha el calor para refrescarte
Te acaba de explotar la cabeza, lo sé. Pero esto tiene su explicación. Cuando hace mucho calor, sudas; es ley de vida. Pero lo que no sabes es que puedes usar tu propio sudor para refrescarte. Cuando estés en la moto y sientas mucho calor, muévete hacia delante y busca ese punto en el que el aire te entre por el cuello de la chaqueta o el mono hacia la espalda. Por mucho que el aire esté caliente, al contactar con tu espalda mojada, notarás fresquito.
mójate
En mi post «Consejos para un motero novato» uno de los puntos era llevar siempre una braga. En verano agobia, sí, pero aparte de evitarte esos posibles picotazos de insectos voladores, resulta muy útil cuando hace calor. Que no te explote la cabeza, el motivo es el agua. Cuando arrancas la moto y te empieza a dar el aire, al llevar la braga mojada, el frescor que sientes en el cuello es, simplemente, maravilloso. Por eso, siempre recomiendo mojar la braga en las paradas para calmar el calor, por lo menos, los primeros 15 o 20 minutos de trayecto (esto depende del calor que haga).
Si el calor ya es extremo, mojarse también la ropa que lleves debajo de la chaqueta o el mono te puede salvar de posibles golpes de calor.
Prepárate para la vuelta
La ida fue fenomenal, creo que fue de los mejores viajes de mi vida. Pero la vuelta… La vuelta fue otra historia. Una tormenta, muchísimo viento, granizo, calor…
Si quieres ver cómo pasé uno de los peores días de mi vida en moto, no te pierdas el siguiente vídeo. Y recuerda, si te gustan mis vídeos, no olvides suscribirte a mi canal de Youtube
Llevo muchos años pensando en sacarme el carnet de moto. Nunca me decido debido al miedo que tengo a poder caerme y sufrir un accidente de gravedad (más aún a raiz de ser padre), pero leo tus post y veo tus videos… y me entra un cosquilleo en el estómago que, dada mi actual situación personal, y si todo sale bien, me tiraré a la piscina en cuanto pueda. Ya no me lo pienso más. Necesito probar esa sensación, necesito descubrir esa libertad de viajar en moto.
Transmites confianza y, al leerte, todo ese miedo desaparece un poquito 🙂
Un saludo y enhorabuena por el blog (y por tu manicura, que es la reostia jajaja)
Miguel, mensajes como este hacen que este proyecto merezca la pena.
Muchísimas gracias y olvídate de miedos, lo único que harán es impedirte que cumplas tus sueños.
(Pero a la moto, siempre respeto)
Yo también soy de la opinión que cuando tienes por delante muchos kiómetros (más de 400), y no quieres pasarte todo el día en la moto, la autovía o la autopista compensa, por aburrida que sea.
Tambíen he viajado con frecuencia a Asturias y a la Rioja, sobre todo en verano. Me atrevo a añadir un consejo, fruto de la experiencia. Ten a mano el forro térmico de la chaqueta. Os aseguro que cuando más frío he pasado viajando en moto ha sido…¡en verano!.
He salido de Madrid con un calor de muerte pero al llegar a Picos de Europa (si vas a Asturias) o al puerto de Piqueras (si vas a la Rioja) la temperatura cambia.
He escuchado mis dientes castañetear en el tunel del Negrón, por llevar una equipación de verano y no haber cogido el forro térmico de la chaqueta.
Ahora no lo olvido nunca. Lo llevo en una bolsita…. por lo que pueda pasar.